Un lugar muy bonito, muy tradicional, la infraestructura y los espacios totalmente japoneses. Estuvimos en el cuarto Isami que es el más grande, 2 adultos 2 niños sin problema. Yo estaba buscando justo lo que ofrecen, vivir una estadía tradicional y me encantó. El personal muy amable, comunicación en inglés, te dejan muchas amenidades para hacer una cómoda estadía.
Yo lo amé pero no es un hotel para cualquiera, dejo puntos a considerar por si les interesa:
Nota: hablo solo del cuarto Isami donde yo estuve, hay otros dos que probablemente sean diferentes.
El techo es super bajito. Si mides más de 1.79mt no cabes parado.
Las escaleras para subir a la recámara son muy empinadas, nada recomendable para niños pequeños o personas con problemas de movilidad.
Todas las puertas y ventanas son al estilo japonés con washi (papel) hay que tener mucho cuidado de no dañarlo, también son corredizas y hay que cerrar con cuidado.
El ofuru de madera es increíble, el cuarto de baño súper bien, los artículos de baño (shampoo, jabón, acondicionador) huelen delicioso y hace que el olor a madera del baño se disfrute más.
Si buscas algo tradicional y conoces las costumbres Japonesas te va a encantar.
Nosotros la pasamos muy bien.