De no ser por la excelente atención del personal de Lobby, esta sería una reseña de 2 solo estrellas.
El Exe Rey Don Jaime es un hotel grande, con muchas habitaciones, que claramente ha visto mejores tiempos o tuvo una mejor administración en otro momento, pero que ahora tiene graves carencias como el sistema de aire acondicionado, mi mayor queja, que no funcionó bien en ningún momento durante los 2 días de nuestra estancia y siempre se sentía calurosa, al igual que el pasillo de todo el piso 10.
Nuestra habitación era amplia, con una muy buena vista de la ciudad, pero carecía de mobiliario, y en consecuencia se veía sumamente vacía y triste: el pequeño cuarto de recibo de la habitación no tenía ni un mueble, igualmente que el baño. Las paredes no tenían ni un cuadro, la tele es algo vieja y no podíamos ver casi ningún canal, solo había una butaca en toda la habitación, la caja de seguridad era muy complicada de operar en comparación a la que se encuentran en otros hoteles, los elevadores son lentos y ruidosos, etc.
Los suministros para el baño estaban bien y completos, la habitación estaba limpia y sin olores extraños.
El área de lobby y bar está bastante bien. El área de desayunos tiende a saturarse de huéspedes y es algo ruidosa y movida, pero los alimentos estaban bastante bien y bien surtidos.
La peor experiencia fue ciertamente la del aire acondicionado. La mejor experiencia fue el excelente trato del personal.
