La experiencia, en general, fue buena. Aprendí que no hay que ir a Florianópolis en temporada. Tardamos 1hora y 40 minutos para ir desde la posada al Mercado Público (17 Km)! La posada misma es my básica pero todo se puede resolver, puedes or a super a una cuadra y comprar tu jabón, por ejemplo. La gabitación que nos tocó era pequeña, pero cabíamos, el baño es chico, pero alcanza, la cantidad de aggua en la ducha es mínima, pero me alcanzó, claro que si tienes mucho pelo... no sé. La atención de Gabriela y su amiga, muy buena. El desayuno puede mejorar sustancialmente con unos yoghurts, p. ej., o unos huevos, pero como dije, todo te lo puedes comprar, aparte, por supuesto. El AC en la habitación, escelente. El wifi en la habitación, muy debil. Por el precio, uno esperaría mas.